Vine y estabas vacía, solo había un hombre que habitaba en ti. Llegué y quise hacerte mía desde el principio, convertirte en un hogar, quise tener hijos, quise crear más, quise llenarte de vida y solo te llené de tristeza y de ansiedad. Lo siento mucho, gracias por todo, eres bella, tienes el espacio perfecto para mí. Gracias por todo, gracias por las ideas que llegaron, las que se fueron, por mis días de tristeza y los de fiesta. Gracias por contener un amor que se acabó a cuenta gotas. Gracias por todo, gracias por todo, gracias por todo, te voy a extrañar mucho mi amada casa, adiós a los sueños que tenía cuando vine aquí, adiós al amor que se terminó, adiós a los planes que nunca concluí, espero que quienes lleguen te llenen de amor.
Lamento mucho no haberte cuidado mejor, hice lo mejor que pude. Traje plantas y decoré tus paredes, quise darte un espacio para liberar mi imaginación. Tengo miedo, hay muchas cosas pasando a mi alrededor, tengo miedo de no poder lograr vivir fuera de esta burbuja de jabón que el universo construyó para mí.
Gracias por todo mi amada casa, gracias por ser y estar para mí.
Gracias